Gjør som tusenvis av andre bokelskere
Abonner på vårt nyhetsbrev og få rabatter og inspirasjon til din neste leseopplevelse.
Ved å abonnere godtar du vår personvernerklæring.Du kan når som helst melde deg av våre nyhetsbrev.
¿Existe una metafísica de la vejez? En caso de que sí, ¿puede ocurrir esta (iluminarse esta, desbocarse esta...) en los alrededores de un supermercado? Leer Cuaderno del Bag Boy, uno de los libros inéditos de Lorenzo García Vega, es asistir, estupefacto, a parecidas preguntas. No sólo porque con su socarronería habitual ¿socarronería que es pathos y a la vez estilö, García Vega desmantela el tradicional chantaje sentimentaloide bajo el cual son escritos casi todos los libros de memorias en español. Sino, porque una vez más, asistimos, a una de las prosas más esquizas y exactas que ha producido el imaginario-isla. La prosa del Ninguno, del Dr. Fantasma, como a partir de Los años de Orígenes disfrutó llamarse. La prosa de un viejo que ha convertido la literatura en un espacio de risita, asfixia. (Carlos A. Aguilera)
«Rabo de anti-nube o sus diarios en general son un caso único dentro de la literatura de la isla. No sólo por su abundancia, sino porque crea tópicos inéditos para el canon cubensis: el del viejo edípico o anciano que aún se siente perseguido por su madre; el de la autobiografía como fecalidad, resto, autismo; el de la vejez como ejercicio de locura; el de la «atención» como neurosis o miedo. Y desde este miedo, esta fecalidad, este edipo, esas obsesiones es que García Vega logra construir algo. Algo tan delirante que, bajo su capa de dudas y frases pseudocondenatorias, no nos podemos dejar de preguntar si todo este libro no muestra, en verdad, un trastorno un poquito más serio» (Carlos A. Aguilera).Lorenzo García Vega (Jagüey Grande, 1926-Miami, 2012) integró el consejo de redacción de la revista Orígenes y perteneció a los consejos editoriales de las revistas Escandalar y Újule, ambas en el exilio. Salió de Cuba en 1968 para establecerse en New York, luego en Caracas, y por último en Miami (la ya mítica Playa Albina). Publicó, entre otros, Suite para la espera (1948), Espirales del cuje (1952), Cetrería del títere (1960), Ritmos acribillados (1972), Rostros del reverso (1974), Los años de Orígenes (1979), Variaciones a como veredicto para sol de otras dudas (1993), Collages de un notario (1993), Espacios para lo huyuyo (1993), Vilis (1998), El oficio de perder (2004), Cuerdas para Aleister (2005), No mueras sin laberinto (2005), Devastación del Hotel San Luis (2007), Erogando trizas donde gotas de lo vario pinto (2011) y El cristal que se desdobla (2016). A su muerte dejó inéditos varios libros, entre ellos este tomo de sus diarios.
No es imposible considerar Los años de Orígenes como la última obra maestra del origenismo. La reducción y el reverso al que es sometido el discurso origenista equivale a ponerlo a mirar de frente hacia el abismo que se abre ante sus límites. Re-encarnar esa «habla fantasmal» en los cuerpos físico y social, re-conectarla con las estructuras psíquicas, textuales y lingüísticas, supone suplir las «deficiencias» del origenismo mediante la apropiación de los discursos del psicoanálisis, la sociología, el budismo y la reflexión sobre el lenguaje y la significación. Relatar, pensar, testificar los años de Orígenes se vuelve en este libro un escribir desde la suspicacia, desde la problematización de la identidad personal y de la experiencia, desde un cuestionamiento de la condición de posibilidad de la narración y el testimonio, desde el recelo ante la opacidad del lenguaje y la conciencia. Es así como el alcance de esta crítica no se agota en el juicio ante el tribunal de la razón al que es llevado el discurso de Orígenes, sino que levanta la base sobre la que se erige la escritura de madurez de Lorenzo García Vega.
Lorenzo García Vega es uno de los raros de la literatura hispana. Desde que en 1948 publicara el poemario Suite para la espera García Vega comenzó a construir una escritura enrarecida, extraña, burlona de torpes encasillamientos genéricos y artísticos. Su obra es de aquellas "menores" que constantemente asedian, e incluso transforman, los centros canónicos de producción artística; esto es, que le insuflan otras energías a la vida de las formas literarias. La presente antología, Ficción en cajitas -título cercano al imaginario estético del artista norteamericano Joseph Cornell, uno de los creadores fetiches de García Vega-, recoge una selección de su "narrativa".
Abonner på vårt nyhetsbrev og få rabatter og inspirasjon til din neste leseopplevelse.
Ved å abonnere godtar du vår personvernerklæring.