Arrastro la carga del pasado y su pesar me impide mirar el ansiado futuro. Pero si vuelvo la mirada, me doy cuenta de que aunque el dolor sea constante en esta vida, puedo decir que la viví. Que las tristezas son parte del aprendizaje de un niño que se hizo hombre, de un hombre que se convirtió en olvido.
En la noche cuando el silencio y la oscuridad son los únicos testigos de mi verdad. Es cuando al leer mi pasado vuelvo a recordar lo que nunca olvidé.
Gjør som tusenvis av andre bokelskere
Abonner på vårt nyhetsbrev og få rabatter og inspirasjon til din neste leseopplevelse.
Ved å abonnere godtar du vår personvernerklæring.Du kan når som helst melde deg av våre nyhetsbrev.